Un Aula de la Naturaleza con actividades de educación ambiental para grupos organizados completa los atractivos de este Parque de Aventuras en Árboles

El Parque Natural Las Batuecas-Sierra de Francia, ubicado al sur de la provincia de Salamanca, tiene aires mediterráneos y atlánticos. Los primeros favorecen, con su calidez, la existencia de muchos tipos de fauna y flora, como los famosos encinares, además de productos como las cerezas, las aceitunas, las uvas y las castañas. Los segundos condicionan el paisaje: sus robles, abedules y piornos están rodeados por bosques de rebollo y castañares, entre otras muchas especies, que los «arropan».

La conocida Armeria salmantica, una planta que solo crece en el Parque Natural y que se caracteriza por formar pequeñas matas, es un atractivo de la zona, que sin duda puede presumir también de su ingente riqueza cultural y patrimonial: sus pinturas rupestres, los restos de minas romanas o las ermitas y monasterios diseminados a lo largo y ancho del Parque le han valido cinco declaraciones de «Conjunto Histórico–Artístico».

Las Batuecas es, sin duda, un lugar para visitar en verano (aunque en cualquier estación del año ofrece sus colores y encantos), además de una oportunidad para conocer algunos de los principales ejemplares de fauna ibérica (tiene un total de 213 especies de vertebrados: 9 del grupo de los peces, 13 de anfibios, 19 de reptiles, 126 de aves y 46 de los mamíferos).

Pero la época estival, además de un momento ideal para viajar, conocer y relajarse, es tiempo de disfrute, de deporte, de diversión. Así que junto al plan turístico en torno a Las Batuecas hay que sumar el paso por su Parque de Aventuras, localizado junto a la Casa del Parque de la localidad salmantina de La Alberca, parada obligada para cualquier visitante de la provincia.

85 pasos entre árboles

Siete son los circuitos de los que se puede disfrutar en este espacio, que propicia el acercamiento a la naturaleza de manera lúdica, y 85 los retos a abordar para poder llegar al final de cada uno de ellos. Su variada propuesta hace que este recurso pueda ser disfrutado por todos los públicos, de manera que, en función de sus características y posibilidades, accederán a los distintos circuitos.

Con una duración aproximada de 45 minutos cada uno, los distintos recorridos presentan alicientes como largas tirolinas, lianas, escalas y redes entre árboles o diferentes tipos de puentes.

Para comenzar, se hace necesario superar dos recorridos Demo, de cinco y seis retos cada uno, tanto para conocer las pautas de seguridad como para familiarizarse con el entorno y el funcionamiento. 

Una vez terminados, los más pequeños pueden acceder ya a la primera (y más fácil) de las propuestas: un Circuito Amarillo concebido para niños de cuatro a nueve años o menores de 1,40 de altura que presenta 16 pruebas a superar. ¡Qué mejor manera de tomar contacto con la aventura en los árboles!

Del verde al negro, crece la dificultad

El Parque ofrece la posibilidad de realizar, a continuación, cinco recorridos en los que el grado de dificultad va creciendo hasta alcanzar una exigencia física propia de adultos.

El Verde, con once retos, está pensado para todos los públicos (a partir de nueve años) por la sencillez de sus pruebas. A continuación se puede pasar al Azul, que con 20 pruebas a superar para lograr llegar al final, es también sencillo, variado y apto para mayores de doce años y con una altura superior a 1,50 metros.

La dificultad de los circuitos va in crescendo, de manea que el rojo, con 14 retos, ya presenta una dificultad moderada, por lo que solo pueden disfrutar de su exploración los mayores de 16 años y que, además, midan más de 1,60 metros.

El negro es el último de los retos a afrontar: con 13 elementos a superar, presenta un nivel de exigencia física mayor. ¡Esta propuesta es solo apta para los más intrépidos!

Más atractivos

El parque de aventuras en árboles «Las Batuecas» cuenta con otro recurso para completar la visita: un Aula de Naturaleza en la que llevar a cabo actividades de educación ambiental en grupos organizados.  

Sin duda, Las Batuecas es un parque natural de visita obligada para todos los castellanos y leoneses, pero, también, para turistas llegados de cualquier punto de la Península y del mundo. Con profundas raíces en el imaginario literario colectivo (no hay que olvidar que el gran Larra las mencionaba en sus Carta a Andrés escrita desde las Batuecas por «El Pobrecito Hablador»), este espacio cuenta con importantes atractivos como la Peña de Francia, el valle de Belén en Herguijuela de la Sierra y los meandros del Alagón en Sotoserrano.

Se trata, en definitiva, de un lugar para conocer, respirar y vivir. De un espacio del que disfrutar y en el que perderse para encontrar los grandes tesoros que nos rodean y nos insuflan el aire que necesitamos. ¿Te lo vas a perder?

Arancha Jiménez

Por Arancha Jiménez

viajarymuchomas.com