Las ruinas de San Antón, en Castrojeriz (Burgos), estrenan un vallado para la mejor conservación de un espacio único en la ruta Jacobea
Las ruinas de San Antón, en Castrojeriz, en la provincia de Burgos, acogen desde hace 20 años un albergue único en la ruta del Camino Francés hacia Santiago de Compostela. Con tan solo 12 camas, el espacio no pasa desapercibido para los peregrinos, quienes alaban la singularidad de un paraje en el que dormir y el alimento es gratis desde su apertura. Sólo la voluntad de cada usuario es de libre decisión de cada uno.

Ovidio Campo, impulsor de este albergue que ya forma parte de la historia del Camino con letras mayúsculas, no oculta el orgullo que supone el esfuerzo realizado durante estas dos últimas décadas. La penúltima reforma (porque seguro habrá nuevos proyectos) ha sido la inauguración del vallado del recinto. Una obra que comenzó en junio y que ha concluido este sábado con un presupuesto de 50.000 euros, aportados por el Ayuntamiento de Castrojeriz.

A la inauguración de la verja han acudido Cecilia Pereira, comisaria del Xacobeo 2021-22 de la Xunta de Galicia; Paolo Caucci, presidente del Comité Internacional de Expertos del Camino de Santiago; Beatriz Francés, alcaldesa de Castrojeriz, y el propio Ovidio Campo, presidente de la Fundación San Antón, propietaria de las ruinas.