Arroz caldoso con alcachofas y vieiras con crujiente de cecina
Un plato fácil de elaborar, económico y, sobre todo, muy sabroso con el que quedarás como un rey (o una reina) ante tus amigos y familia. La receta de hoy es una mezcla perfecta entre tierra y mar. ¡Ah!, las vieiras pueden sustituirse por gambones, berberechos, mejillones, almejas o langostinos… siempre pelados y sin cáscara.
INGREDIENTES (4 personas):
- 1 Kilo de alcachofas
- 1 pimiento verde
- 1 cebolla roja
- 1 tomate maduro
- 1 diente de ajo

- 400 gramos de arroz bomba
- Caldo de pescado
- 8 vierias
- 4 rodajas de cecina de León
- Aceite.
- Sal
- Azafrán
PREPARACIÓN:
- Eliminamos las hojas de fuera de las alcachofas, porque solo vamos a utilizar el corazón, bien limpio. Partimos cada unos en 4 trozos y los colocamos en un bol con agua y unas gotas de limón (opción, en lugar de limón se puede usar hielo y una rama de perejil).
- Mientras en una cazuela baja hacemos el arroz. Tres cucharas de aceite con el diente de ajo partido, para añadir, a continuación el pimiento verde y la cebolla roja bien partida. Rehogamos todo, añadimos también una pizca de sal y dejamos 5 minutos a fuego medio hasta que todo quede bien pochado.

- Luego añadimos el tomate maduro, previamente pelado y rayado. Dejamos todo 10 minutos.
- Es el momento de añadir las alcachofas escurridas. Removemos con cuidado y con cuchara de madera durante 5 minutos.
- A continuación, el arroz bomba (1 de arroz por 2 de caldo). Queremos que esté caldoso, pero no aguado. Así, durante 18 minutos, añadiendo caldo en caso de necesitar para que estén cubiertos todos los ingredientes.
- Retiramos del fuego y se deja reposar 5 minutos.

- Mientras, en una sartén, con el aceite bien caliente, colocamos las vieiras, medio minuto por cada lado, con una pizca de sal y sin concha, sólo el producto.
- Procedemos por separado igual con la cecina, aunque sólo unos segundos en aceite caliente.
Y listo. Servir en plato hondo el arroz caldoso con sus alcachofas y todos los ingredientes, colocando encima las vieiras y la cecina crujiente. ¡Buen apetito!

Por Mertxe Pazos